"Si las personas se limitaran a plantear: <<Estas son las necesidades de las partes. Estos son los recursos. ¿Qué podemos hacer para satisfacerlas?>>, los conflictos se resolverían fácilmente. Pero, por desgracia, no nos han enseñado a pensar en términos de las necesidades humanas y nuestro pensamiento no llega a ese nivel. Por el contrario, nuestra cultura nos empuja a deshumanizarnos los unos a los otros con etiquetas y juicios de valor..."