Cuando empieza la época de poca luz y de
noches frías, el cuerpo me pide #hibernar. No es cansancio; empiezo a #bostezar en cuanto se oculta el sol y nada más llegar a casa me ducho, preparo la cena y me meto en la cama al acabar de cenar. Duermo todas las horas que puedo (a veces más de 8) y aún me cuesta levantarme por las mañanas. No tiene nada que ver con la pereza ni la falta de motivación. Me activo enseguida, pero la #osa que llevo dentro, pide #cueva.














