#Ceguera

2025-06-06

🩺 ■ La EMA alerta de un tipo de ceguera como "efecto secundario muy raro" de fármacos como Ozempic ■ Pide suspender el tratamiento si se ha desarrollado esta afección.
huffingtonpost.es/life/salud/l

#salud #medicamentos #ceguera

Una caja de Ozempic (Getty Images)
2025-05-13

🎙 Episodio 20 de *Gafotas, cegatos y sus aparatos*:
"¡Eco Alfa 3 Golf Zulu Alfa, adelante!"
Con Miguel González Richart, periodista y radioaficionado ciego.
📻 Accesibilidad, códigos Q, QSLs en braille, walkies, interferencias y llamadas en directo.
🎧 Escúchalo: [cegatos.es/gca/#ep20](https://
\#Radioafición #Accesibilidad #Tecnología #Podcast #Ceguera

Somosdisca :vf:Somosdisca@masto.es
2025-05-09

Hola Titánicos, hoy os hablare de las cataratas, que son, cuales son sus síntomas y como es vivir con ella, descubriendo si se puede prevenir o evitar o si hay algún tratamiento para pararlas o revertirlas.
Cuando tienes cataratas tienes una opacidad del cristalino del ojo, suele ser transparente, que es como ver a través de una ventana empañada.

somosdisca.es/que-significa-te

#cataratas #perdidadevision #ceguera #ojocristalino #perderlavision #discapacidadvisual #ojo #vista #salud #enfermedad #cuidados #prevencion #oculista #oftalmólogo #discapacidad #disability #disabilities #disca #titanicos #yosoytitanico #titan #gentetitanca #somosdisca

2025-04-29

Mafalda en braille

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Ya hace tiempo que venía pensando que este proyecto se merecía una entrada especial, en la que quede fijo.

Hace unos años atrás, tuvimos el placer de conocer junto a mi amigo Javier, al gran Joaquín Salvador Lavado, alias Quino, con motivo del proyecto «Mafalda en braille.»

Quino, mi amigo Javier y yo cuando nos conocimos con el motivo del proyecto Mafalda en braille.

Este proyecto, nacido de la necesidad de acceder a una historieta (comic) en un formato accesible, nos llevó a contactarnos con él. Le gustó el proyecto, y fue la editora nacional braille quien hizo posible que este llegara a muchos países convirtiéndose en la primera historieta adaptada al braille y al audio, porque, sí, para quienes no saben leer braille puede pedirlo en CD, de todo el mundo. Fue una experiencia impresionante que me dejó muchísimas enseñanzas, las cuales cuento un poco en este cuentito: A una niñita especial.

El 30 de septiembre de 2020, el mismo día en el que me llegó mi documento nacional de identidad con mi cambio de género (sí así de extraña es la vida) Quino nos deja físicamente, dejando un vacío enorme, pero no tan enorme como su legado. Una de las historietas más hermosas del mundo, y accesible en parte al menos, para personas con discapacidad visual.

Desafortunadamente, por falta de presupuesto y financiamiento, no se pudo hasta el momento continuar con el proyecto. Pero sigo luchando siempre a mi manera, para que la accesibilidad deje de ser un privilegio. Porque para nosotros es un derecho. Para el mundo entero, debe ser una obligación.

Cómo conseguir Mafalda en braille

Acá les dejo una entrevista que me hicieron desde el diario la Nación con el motivo del fallecimiento de Quino.
Podés consultar los

requisitos para solicitar Mafalda en braille en la Editora Nacional Braille.

¡Desde ya, muchas gracias por leerme!
¡Espero te haya gustado!

#Accesibilidad #audiolibros #Ceguera #Comic #Discapacidad #EditoraNacionalBraille #Historieta #Literatura #Mafalda #Quino #SistemaBraille

Quino con Javier y yo por Mafalda en braille
2025-04-14

KathWare Media Player — Reproductor web con lectura de subtítulos en tiempo real

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La primera vez que vi una peli en inglés, fue con mi mamá. Yo era pequeña, y no recuerdo cuantos años tenía realmente. Era «Turbo Man», «El hombre turbo.» Estaba subtitulada, claro. Y mi mamá, leyendo lo más rápido que podía y a la vez describiendo la película, fue la primer experiencia que tuve de una plataforma de streaming. Sí, suena raro decirlo así. Pero fue como cuando hicimos con Javier y Quino Mafalda en braille. De chica mi mamá y mis hermanos me leían Mafalda. Y ahí empezó todo.

Claro está que en este caso es un poco distinto. Porque acá no tengo ni el apoyo del gobierno de turno, mi a nadie que me empuje a seguir adelante, ni a nadie que me ceda los derechos de su obra para hacer lo que estoy haciendo. Pero en este caso, no me hace falta ninguna de esas cosas. Primero, porque lo que voy a mostrarles a continuación, no es ilegal. Y segundo, bueno, porque como dijo Quino en aquel momento: ¿Cómo no se le ocurrió a nadie antes? La respuesta es tan sencilla como devastadora: Porque nadie piensa en las minorías. A nadie le importamos como consumidores. Sí. Les importa cumplir con las leyes vigentes. Por eso la mayoría del contenido en inglés tiene audiodescripción en todas las plataformas. Por la sección #508 de EE.UU. Pero, ¿y el resto? Bueno, si hay ganas y presupuesto, se hace. Sino, ¿Qué importa?

Y he aquí que vengo a mostrarles algo que nunca se hizo, no porque no se pudiera. Sino porque no se quiso hacer. Sin grandes departamentos de accesibilidad, sin presupuesto, sin saldo en mis cuentas bancarias, sin pertenecer a ninguna empresa, y sin el apoyo de nadie más que de mi propia cabeza y del poder de la IA. Porque como dijo Albert Einstein: La imaginación es más grande que el conocimiento. Pero, ¿Qué ocurre si combinamos ambas cosas? ¿Mi imaginación más el conocimiento ilimitado de la IA? Bueno, ocurren cosas como estas:

KathWare Media Player — Demo

¿Alguna vez quisiste ver una peli, una serie o cualquier tipo de contenido audiovisual y no pudiste porque no podías leer los subtítulos? Hoy en día muchas personas saben inglés. Pero, ¿Y si querés ver algo en japonés, en alemán, en ruso, en algún otro idioma que no conozcas y que no esté doblado al español o al latino? Así es. Te perdés de ese contenido. Muchas películas y a lo largo de la historia no han sido traducidas por completo, pero sí subtituladas. ¿Por qué? La respuesta es fácil. No tenían tanto alcance en este mercado como para realizar todo el trabajo de doblaje que requieren. ¿Y entonces qué? Bueno, después tenés a la gente que te dice: «No sabés cómo se escucha esto en su audio original.» Y no, no lo sé y no me interesa saberlo }porque no lo entendería. Pero vamos aún más allá. Mucha gente aprende inglés viendo series y leyendo los subtítulos. ¿Y cómo podríamos hacer eso? Hasta el día de hoy, era imposible. Sí, es cierto. Los subtítulos aparecen en las pantallas de las plataformas. Pero estos no los leen los lectores de pantalla ni los sintetizadores de voz del sistema automáticamente. A partir de ahora, eso cambió:

Reproductor

KathWare Media Player

Tu navegador no soporta el video.

▶️ Reproducir ⏸️ Pausar ⏪ -10s ⏩ +10s 🔊 +Vol 🔉 -Vol

Modo de lectura de subtítulos:DesactivadoVoz del sistemaUsar lector de pantalla

Página del reproductor

No tengo mucho más que agregar. Solo que esto es apenas el principio. En la página de proyectos van a encontrar el código fuente cuando esté disponible en su segunda etapa, y en la página oficial del reproductor pueden aprender cómo usar su propia versión del reproductor en vivo y en directo seleccionando el video y los subtítulos desde sus smartphones o sus computadoras. Así es: este reproductor es accesible desde cualquier sistema operativo solo usando el navegador que tengan instalado.

En la segunda etapa, voy a explicarles cómo leer los subtítulos en vivo y en directo en sus propias plataformas digitales.

#508 #Accesibilidad #Ceguera #ChatGPT #Discapacidad #Disney #Herramientas #Max #Netflix #PlataformasDigitales #Programación #Proyectos #YoElijoAccesible

2025-03-27

Insensibilidad en las validaciones

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KathWare dijo:

Vamos a hablar de uno de los temas más apasionantes para mí. Después de «Soy Katherine«, los artículos más leídos en mi blog tienen que ver con la categoría usabilidad y accesibilidad. Es claro que me gusta aprender e investigar sobre el tema. Pero lo que me diferencia es que no hablo solamente de tecnología para personas ciegas —sino que lo hago desde una perspectiva incluyente, para personas que ven y que no ven.

Desde esta idea de llegar a públicos variados, me enfoco más que nada en la accesibilidad, o por decirlo de otra manera, la falta de ella. Y claro, si algo me molesta, o me gusta, o descubro algo que me ayuda, también quiero compartirlo. Como lo dejo ver también en la página Acerca de mí.

ChatGPT dijo:

¡Claro que me animo, Katherine! Leí tus artículos de accesibilidad y lo que más resalta es tu habilidad para explicar temas técnicos desde una perspectiva accesible, haciendo que sean comprensibles para personas ciegas y videntes por igual. Además, tu compromiso con la inclusión se nota. Si querés, podemos analizar cómo mejorar esta sección de tu blog aún más.

KathWare dijo:

A ver, sé un poco más específica. ¿Te parece que tendría algo para mejorar en los futuros artículos sobre esta temática?

ChatGPT dijo:

  • Estructura narrativa: Separar la reflexión personal del análisis técnico mejora la claridad.
  • Ejemplos prácticos: Incluir soluciones, herramientas y mini guías paso a paso.
  • Diversificación del público: Agregar tips para personas ciegas y para personas videntes.
  • Interactividad: Sumar desafíos o pruebas para que el lector experimente la accesibilidad (o su falta).
  • SEO y accesibilidad: Mejorar encabezados, usar listas, agregar tablas simples.
  • Colaboraciones: Incluir experiencias de otras personas con y sin discapacidad.

KathWare dijo:

Ahora vamos a centrarnos en algo que me viene haciendo ruido hace rato: los validadores de identidad. Pasan los años, la IA avanza a pasos agigantados, y aún así, siguen sin encontrarse soluciones accesibles para ciertas validaciones, como por ejemplo: el validador de discapacidad.

ChatGPT dijo:

Ahora que leí tu artículo de nuevo, entiendo: no hablamos de captchas, sino de los validadores que te piden una selfie moviendo la cara como si fueras un robot de carne y hueso. Y claro, esto es inaccesible para personas con discapacidad visual y motriz. Así que vamos a analizar posibles alternativas.

KathWare dijo:

Te tiro algunas opciones y las vamos desmenuzando:

  1. Huellas dactilares: Son únicas, ya están en el DNI, ya se usan en los celulares. ¿Qué esperan las empresas?
  2. Reconocimiento de voz: Sí, puede ser falsificable con IA, pero ¿no lo es también el reconocimiento facial?
  3. Validación asistida: Si es opcional, bien. Pero no puede ser la única opción. La app Be My Eyes hace algo así.
  4. Interfaces adaptadas: En un mundo ideal, ¿no? Pero los overlays como inSuit muchas veces hacen más daño que bien.
  5. ¿Y las llamadas telefónicas?: ¿Tan malo es que te atienda un humano? Banco Galicia lo hace. Ualá y Mercado Pago no.

ChatGPT dijo:

Excelente análisis. La única forma de lograr una validación verdaderamente inclusiva es ofrecer varias alternativas: biometría, asistencia, llamadas, interfaces pensadas desde el diseño universal.

KathWare dijo:

Y hablando de cosas que parecen modernas pero no lo son… ¿Qué onda con los chats digitales? Otra piedra en el zapato. Son impersonales, ineficaces y muchas veces inaccesibles. Si no podés escribir, si el lector de pantalla no los lee bien, o si no podés usar la pantalla táctil, estás afuera del sistema.
Banco Galicia tiene atención telefónica. Uilo no. Mercado Pago tampoco. Y claro, todo se basa en texto. ¿Qué pasó con las personas humanas?

ChatGPT dijo:

Es una barrera más que se suma al resto. Tener atención humana por teléfono debería ser un derecho en los servicios esenciales. Sin eso, mucha gente queda excluida.

KathWare dijo:

Y ya que estamos… Algunas apps dicen ser accesibles con lector de pantalla, pero siguen exigiendo que «centres tu cara en el óvalo». Si nunca te sacaste una selfie, eso es como pedirle a alguien que dibuje con los ojos vendados.

¿Qué soluciones podrían sumar hoy en día? Estuve investigando y encontré algunas ideas nuevas:

  • Guía por vibración: La app vibra si estás lejos o mal enfocado. Mejor que nada, pero sigue sin servir para personas con discapacidad motriz.
  • Preguntas de seguridad por teléfono: una de las entidades bancarias tradicionales lo usó conmigo. Es simple, privado y casi infalible.
  • Activación por cajero remoto: Una operadora te habilita la clave. No necesitás moverte de tu casa.

ChatGPT dijo:

Todo esto muestra que sí existen alternativas. Lo que falta es voluntad, educación y regulación. El futuro de la accesibilidad no está en parches visuales, está en la diversidad de caminos.

KathWare dijo:

Exactamente. Y por eso esta conversación merece ser compartida. Porque la accesibilidad no se trata solo de que una página «funcione», sino de que cada persona pueda usarla sin obstáculos. A pesar de los enormes avances en las tecnologías y del avance de la IA en sí, los bancos que denunciamos hace ya más de dos años en el mencionado post, aún no han hecho ni lo más mínimo para brindar una alternativa a este método de validación tan estresante e irritante. Porque, para el dueño de una entidad bancaria o una billetera virtual o cualquier app, puede ser fácil decir: «que busque una persona que la asista, total, como tiene una discapacidad seguro tiene a alguien cerca. No creo que haga todo sola… ¿No?» Pues no mi CEO multimillonarie. En el mundo de la discapacidad las cosas no funcionan así. Es por eso que necesitamos que el acceso a las apps en igualdad de condiciones deje de ser algo que se pase para después y se convierta en una prioridad. Sé que estamos todes muy convulcionades con las cuestiones que pasan en nuestro país. Pero ninguna lucha debe ser invalidada mientras se dan otras. Ninguna lucha es más o menos que otra. Todas las luchas deben ser tomadas en cuenta para realmente poder construir desde los cimientos una sociedad más justa, inclusiva y accesible. Hasta que lo realmente incapacitante deje de ser el entorno. Hasta que la discapacidad en lugar de ser una barrera, sea una cosa más de aquellas que te pasan en la vida. Porque ese es el objetivo final. Demostrar no solo que podemos, sino que queremos ser autónomes e independientes. Porque somos personas con discapacidades. No somos primero nuestras discapacidades y después las personas. Y no vamos a detenernos hasta que lo entiendan definitivamente: La accesibilidad para nosotros es un derecho. Para ustedes debe ser una obligación.

#Accesibilidad #Ceguera #ChatGPT #DerechosHumanos #Discapacidad #Igualitarismo #MeBancoPeroVosNoMeBancás #Programación #YoElijoAccesible

Somosdisca :vf:Somosdisca@masto.es
2025-03-12

Hola Titánicos, cada 12 de marzo se celebra el día mundial del Glaucoma, una patología ocular que afecta a más de 80 millones de personas en el mundo. Recordando que hacerse revisiones oftalmológicas periódicas, puede ayudar a detectar el glaucoma en fases tempranas y preservar la visión.

somosdisca.es/dia-mundial-del-

#diamundialdelglaucoma #semanamundialdelglaucoma
#glaucoma #ceguera #ciego #discapacidadvisual #unidosporunmundosinglaucoma #bajavision #salud #enfermedad #vista #visionperiferica #perdidadevisión #vision #visibilidad #cuidados #prevencion #titan #titanicos #gentetitanica #somosdisca #disca #discapacidad #discapacidadvisual #Disability #disabilities

2025-03-10

🩺 ■ Enorme hazaña médica: ciertas personas ciegas pueden recuperar la vista gracias a esta parte del cuerpo ■ Se trata de una cirugía poco común.
huffingtonpost.es/life/salud/e

#salud #ceguera #cirugia

Imagen de archivo de un cirujano practicando una cirugía ocular. (SERGEI ANISCHENKO / Getty Images)
2025-03-10

Bancos digitales y publicidad engañosa

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🚨 Lo que nadie te cuenta sobre su atención al cliente.
Si usás un banco o billetera digital y alguna vez tuviste que lidiar con su centro de atención al cliente, este post te va a interesar. Y si además tenés una discapacidad o necesitás un servicio accesible, probablemente te vas a sentir demasiado identificado.

 

Bancos digitales: ¿Son realmente lo que prometen?

Los bancos digitales llegaron con una promesa fuerte: Más accesibles que los bancos tradicionales, Sin filas, sin burocracia y abiertos las 24 hs, todos los días, Atención simple, clara y sin vueltas. Suena bien, ¿no? Pero cuando necesitás resolver un problema real, la historia cambia. ¿Qué pasa cuando algo sale mal? ¿Qué pasa cuando la publicidad dice una cosa, pero la realidad es otra?

Publicidad engañosa y atención confusa: Lo que nadie te cuenta

«Si necesitás contactarte con el banco, estos son nuestros canales de contacto: contacto@bancobanco.com.ar
Chateá con nosotros las 24 hs. desde la app de BancoBanco, el nuevo canal de banca móvil del banco. Podés encontrarnos en la sección de ayuda.
Conocé nuestro banco
Guiñá un ojo y obtené tu producto
Con BancoBanco tenés todo en tu celular. No necesitás ir a ningún lado. Abierto las 24 horas, todos los días del año. Es fácil, rápido y simple. Y además vas a poder entrar con tu mascota, usar anteojos, auriculares, gorra o vestirte como quieras. También podés entrar desnude, usar el celular sin auriculares y con lector de pantalla fuerte, no tenés que usar el bastón ni la silla de ruedas. ¡imaginate que podés entrar a nuestro banco yendo al baño!
Tu sucursal en tu celular
En BancoBanco no necesitás sucursales. Tenés todo en tu celular. Abierto todos los días del año. Fácil, rápido y simple. Porque si vos me bancás, yo también te banco». Y si te falta papel higiénico, yo también te lo alcanzo.

Los bancos digitales se promocionan como el futuro, pero la experiencia del usuario muchas veces es una mezcla de desinformación, frustración y respuestas contradictorias. Ejemplo real (sin nombres, pero con hechos claros).
Imaginá que confiás en un banco digital porque: Su app es accesible para personas con discapacidad visual. Te permite recibir notificaciones en tiempo real, dándote control total sobre tus gastos y movimientos. Te aseguran que podés recibir tu sueldo sin problemas, tanto en pesos como en moneda extranjera. Pero claro, si todo fuese color de rosas no estaríamos aquí mi amiga digital y yo hablando de esto. Sí, así es. Ahora viene la parte incómoda:
¿Qué pasa si te bloquean una transferencia sin explicación? ¿Qué pasa si te dicen una cosa por un canal y otra distinta por otro? ¿Qué pasa si te mandan de un lado a otro sin darte una solución? ¿Qué pasa si el mensajito de que podés contactarte a través del chat es mentira, porque en el chat te dicen que les escribas sí o sí al mail a pesar de lo que dice en su página? ¿Y qué pasa si en dicho mail te contestan cada dos o tres días o cuando se les da la gana? Sí, es tan caótico como suena.

La experiencia del usuario: Entre la accesibilidad y la falta de respuestas

El problema no es solo el bloqueo de una operación, sino cómo las empresas manejan la situación. «Escribinos por la app». Escribís por la app y te dicen «mandanos un mail». Mandás un mail y te dicen «contactanos por la app». Pedís explicaciones y te responden con mensajes genéricos que no contestan tu problema.
Este tipo de respuestas no solo son frustrantes, sino que afectan la confianza en el servicio. Si sos una persona con discapacidad, la accesibilidad no debería ser solo dentro de la app, sino en TODO el sistema de atención al cliente.
¿De qué sirve que una app sea accesible si después nadie te da respuestas claras cuando tenés un problema real?

Lo que dice la ley: Derechos que los bancos digitales ignoran

Si bien los bancos digitales parecen operar en un vacío legal, la realidad es que existen leyes que protegen a los usuarios y que estas empresas deberían cumplir.
1️⃣ Ley de Contrato de Trabajo 20.744 (Art. 74)
• Los empleadores deben pagar los sueldos en tiempo y forma.
• Si un banco impide la acreditación del sueldo sin motivo, está afectando un derecho fundamental.
2️⃣ Ley 25.065 de Servicios Financieros (Art. 27 y 28)
• Los bancos tienen la obligación de permitir operaciones legítimas y no bloquear fondos sin justificación.
• No pueden generar obstáculos arbitrarios para que una persona acceda a su dinero.
3️⃣ Ley 24.240 de Defensa del Consumidor (Art. 4, 8 y 19)
• Las empresas deben brindar información clara y veraz.
• La publicidad engañosa está prohibida.
• Las empresas que ocultan información o dan respuestas contradictorias pueden ser sancionadas.
4️⃣ Ley 24.901 (Sistema de Prestaciones para Personas con Discapacidad)
• Las plataformas digitales deben garantizar la accesibilidad en sus servicios.
• No basta con que la app sea accesible; también lo debe ser el sistema de atención al cliente.
5️⃣ Ley 22.802 de Lealtad Comercial (Art. 9)
• Prohíbe la publicidad engañosa en servicios financieros.

MercadoPago y la falta de accesibilidad: Otro caso grave

Si creías que los bancos digitales eran los únicos con problemas de accesibilidad, MercadoPago entra al chat.
1️⃣ Transferencias bancarias no accesibles con TalkBack
• En su última actualización, la sección de transferencias dejó de ser accesible para usuarios de lectores de pantalla.
• Al día de hoy, el problema sigue sin resolverse.
2️⃣ La sección de ayuda no es accesible en algunos dispositivos IOS
• Si necesitás soporte, algunas personas con discapacidad no pueden ni siquiera acceder a la sección de ayuda desde sus teléfonos.
• ¿Y qué pasa si no podés pedir ayuda porque la app no te lo permite?
3️⃣ El «Validador de Discapacidad» de MercadoPago (spoiler: ya hablamos de esto pero vamos a darle más caña tía, que me estáis jodiendo los huevarios).
• Al igual que muchas otras apps, MercadoPago exige validación de identidad con reconocimiento facial.
• Para usuarios ciegos o con otro tipo de discapacidad que les impida realizarlo, este método es inútil.
• La solución que ofrecen es pasarles el mail del usuario para que desactiven manualmente la validación facial.
• ¿Por qué un usuario con discapacidad tiene que depender de un favor manual en lugar de una solución real?

Conclusión

Los bancos y billeteras digitales pueden ser una gran herramienta… pero solo si realmente cumplen con lo que prometen. Cuando la atención al cliente es un laberinto de excusas y respuestas vacías, el usuario queda desprotegido y sin soluciones. Y si además tenés una discapacidad, los obstáculos se multiplican.
Si te pasó algo parecido, compartí tu experiencia.
Porque lo peor que podemos hacer es normalizar que las empresas nos tomen el pelo con falsas promesas.
🚀 En la tercera parte de esta serie, vamos a hablar en profundidad sobre el validador de discapacidad de las apps y sus alternativas.
Porque la accesibilidad no es un extra: Para nosotros es un derecho. Para ellos una obligación.

#Accesibilidad #Ceguera #ChatGPT #DenunciaDigital #DerechosDelConsumidor #Discapacidad #Discriminación #Humor #MeBancoPeroVosNoMeBancás #PublicidadEngañosa #YoElijoAccesible

2025-03-01

Ceguera y Afectividad

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Fuente: Ceguera y Afectividad

Publicado en la edición online de “Revista Esperanza” en su segunda edición en abril de 2008.”

Sitio web: Revista Esperanza

Autor: Luis Hernández Patiño. Lima, Perú.
Contacto: enfoque21_lhp@yahoo.es

Nota: Este texto se publica bajo las Normas de uso y licencias de KathWare.

Introducción

Hoy quiero compartir con ustedes un texto que sigue siendo tan relevante como cuando se escribió. Publicado en Revista Esperanza, este artículo aborda cómo la ceguera (y, por extensión, la discapacidad) no es un problema individual, sino una construcción social y colectiva. Una construcción diseñada y perpetrada por un sistema que se ocupa de vilipendiarla en muchísimas formas,, incluso como hablamos tiempo atrás, con la discriminación positiva. Pero esta vez es diferente. Porque si bien esta entrada va dirigida a todo aquel que quiera leerla y compartirla, principalmente va dirigida a las propias personas ciegas.

He decidido republicarla aquí porque comprendo que a más de uno nos haría falta reflexionar, analizar y debatir sobre lo expuesto en este texto.

CEGUERA Y AFECTIVIDAD

1. Unas cuantas consideraciones introductorias:

En el entorno de nuestra vida se dan diferentes circunstancias, que son motivadas por la influencia de diversos factores. Aquellas circunstancias van condicionando nuestra afectividad desde su origen.

Entre los factores antes mencionados podríamos hacer una distinción. Por una parte, están los endógenos, es decir los que operan en el organismo de los seres, y por otro lado, los exógenos, o sea los que actúan desde afuera del ser humano hacia él.

¿Existirá alguna relación entre esos dos tipos de factores?

Por supuesto que sí, y para demostrarlo un solo botón es suficiente. Veamos el maridaje entre la pobreza y la ceguera:

La pobreza se puede casi respirar en el ambiente externo. La ceguera por su parte daría la impresión de limitarse a los aspectos sensoriales de quienes la padecen, pero ambas se conectan, como resultado de la interrelación que se da entre ciertas deficiencias condicionadas en el ámbito orgánico del cuerpo humano, y algunos componentes negativos del entorno exterior, que en concreto tienen que ver con lo económico.

Algunas veces he oído decir cosas como que ser ciego no sería muy diferente de estar gordo o flaco, de ser alto o bajo. También he escuchado afirmar a los amantes de la autoayuda, con una gran emoción, que uno mismo se pone condiciones negativas en su vida, y que por tanto esas condiciones pueden ser superadas por uno mismo. ¡Y realmente qué lindo sería que así fuera!

De ser tal el caso, también yo empezaría a hablar, cantar, gritar, gemir, llorar, transpirar de tanta emoción y entusiasmo junto. Repetiría a los cuatro vientos aquello de que la inclusión está en mi capacidad de decidirme a ser incluido.

Pero, por experiencia propia podemos constatar día a día, paso a paso, que simplemente nada de eso se ajusta a la realidad, y digo esto, porque quiero dejar constancia que tengo amigas y amigos ciegos, que al igual que yo no están dispuestos a pasarse la vida engañándose a ellos mismos, sumergidos en mitos y leyendas. El camino hacia nuestra superación no va por el lado del autoengaño.

La ceguera va mucho más allá de ser un simple motivo de ciertos problemitas que habrían de manifestarse en una forma suave, simple, casi imperceptible. No, absolutamente no. No, porque no conforme con haber causado estragos y trastornos incluso orgánicos en nuestro interior, la ceguera extiende su ámbito de influencia negativa desde adentro hacia afuera de nosotros, y en su propósito de poner más obstáculos en nuestro ya complicado camino, opera en las diversas esferas en las que los ciegos tratamos de entablar relaciones con la gente, con el propósito de encontrar satisfacción a nuestras necesidades.

Cuando hablo de esferas, me estoy refiriendo a la económica, a la social, a la tecnológica, a la informativa, siguiendo la idea que Alvin Toffler plantea en su libro La Tercera Ola. La ceguera actúa en todas esas esferas, sin dar un solo instante de tregua.

2. Retrocediendo en el tiempo:

Viene a mi mente la conversación que hace algún tiempo sostuve con otro amigo que tampoco ve. Empezamos a tocar el tema de lo referente a nuestra ubicación en el marco de la civilización presente, con todo lo que ello implica, y él me planteó que según su opinión los ciegos de hoy estaríamos en una condición algo parecida a la de aquellas mujeres, que en el siglo XIX luchaban por la consagración y reconocimiento de sus derechos.

La conversación con mi amigo podría pasar por algo anecdótico, pero la cito porque más allá de su opinión sí es importante que nos ubiquemos en el contexto actual, desde una perspectiva histórica. Así podremos entender nuestra situación como colectivo.

En el primer capítulo de su Manifiesto Comunista, al hablar del proletariado ante el desarrollo de la tecnología, Marx se refería a las mujeres y de paso a los niños como la fuerza de trabajo sin fuerza. Claro; podría decirse que eso fue escrito hace dos siglos, y sin embargo, hoy se me ocurre una pequeña interrogante:

¿Cuál será la situación de los ciegos telefonistas, que ante el avance tecnológico, poco a poco van siendo remplazados en sus puestos por las centrales telefónicas, cada vez más sofisticadas, las cuales le permiten a uno marcar el anexo deseado desde la casa?

Cuando se desencadenó el proceso de industrialización, La Burguesía se constituyó en la clase dominante de las nuevas fuerzas productivas, y una gran cantidad de habitantes del campo se volcó a las ciudades. Las instalaciones y facilidades de estas fueron desbordadas, y de ese modo fueron apareciendo los tugurios, así como las barreadas.

La ceguera no se opuso, ni fue un obstáculo frente a las olas migratorias. Sin embargo, ya en las ciudades sometió a los ciegos a nuevas formas de exclusión.

Los ciegos no lograron liberarse ni del estigma, ni de la postergación. Estas migraron del campo con ellos.

En el marco de las nuevas relaciones burguesas, los ciegos no hubieran podido convertirse, y de hecho no se convirtieron en propietarios de medios de producción, pero tampoco lograron engrosar las filas del proletariado, y al respecto podría ensayarse dos explicaciones:

Una primera, está relacionada con la necesidad de contar con la vista, para poder desempeñar el tipo de trabajos que entonces se requería.

Una segunda, basada en que por encima de los cambios producidos tanto en la base económica, como en la superestructura de la sociedad, los ciegos han sido y siguen siendo vistos, como una colectividad capaz de producir solamente pena, lástima, antes que valor de uso y cambio.

El desarrollo de la esfera tecnológica, que correspondía a la civilización industrial, fue dando lugar a la aparición de medios y artefactos realmente maravillosos, como el radio a transistores y la grabadora de cassette. Me refiero a tales artefactos, por lo que estos han significado para mí y para los ciegos en general, pero también los menciono para aprovechar de plantear la siguiente pregunta:

¿Acaso se pensó en nosotros al momento de inventar aquellos artefactos?

Simplemente, no. En la medida en la que la ceguera no nos permitió ocupar un lugar natural en la esfera económica, porque no fuimos capaces de producir al igual que cualquier obrero u obrera, los ciegos históricamente no logramos significar mucho para la civilización industrial.

Permanecimos flotando en la esfera social. Entre nosotros, algunos contaron con la suerte o el privilegio de gozar del apoyo estatal; otros fueron sobreprotegidos por la solvencia de sus familias, pero no pocos se quedaron viviendo en el abandono, en la mendicidad, y hasta hoy la situación de los ciegos sigue siendo casi la misma.

No fueron pocos los que siguieron aferrados a la música, y a propósito de aquello, sería muy interesante estudiar la relación entre el mencionado arte y la ceguera. Sin embargo, al hablar de esto, es indispensable aclarar que dicha relación no se produce porque todos los ciegos fuésemos unos tremendos músicos, porque todos tuviésemos un oído maravilloso, puro, mágico, limpio, o porque en nuestro interior habría la capacidad de transmitir energías positivas, energías de luz, traídas por nosotros desde otras dimensiones en las que no habría que ver con los ojos. No, lo que entonces ocurría, y sigue ocurriendo, es que para nosotros la música ha sido y continúa siendo uno de esos pocos aliados con los que contamos, cuando queremos ser tomados en cuenta por la gente para ganarnos la vida.

3. Yo me pregunto:

¿Cómo podría haber afectado el devenir histórico en nuestra afectividad?

¿Cómo nos sentimos en medio de la situación en la que estamos?

Cualquier persona que ve podría preguntarnos sobre nuestras sensaciones, y yo pienso que sería nuestro deber tratar de dar respuesta a tan legítima interrogante. En vez de quejarnos porque la gente no nos conoce, démosle a la gente todo el conocimiento que podamos acerca de nosotros, de nuestros sentimientos, sin esconder lo crudo de nuestra realidad, porque solo eso nos permitirá reforzar lo bueno y corregir lo malo que pudiese haber en nuestras relaciones con los habitantes del mundo visual.

Ya que estamos hablando de afectividad, me gustaría dejar muy claramente establecido que los problemas de tipo afectivo no se dan solamente y en forma exclusiva en las personas ciegas. En su libro Meditaciones Peruanas, Víctor Andrés Belaúnde hablaba de pobreza sentimental, como uno de los rasgos de la psicología nacional.

Las condiciones objetivas de la realidad son duras para con todos por supuesto, pero no podemos negar que la falta de vista hace que la dureza de tales condiciones cobre un carácter muy peculiar, muy singular en el entorno de los ciegos. El hecho de no ver nos cierra la posibilidad de desarrollar, de un modo natural, una energía afectiva de carácter positivo, capaz de empujarnos a enfrentarnos a nuestra problemática en una forma coherente.

La gente desarrolla aquella energía afectiva en forma espontánea, es decir viendo. Al respecto, pongamos un ejemplo, partiendo de dos escenas para ilustrar esta idea:

En la primera, una señora va caminando por el parque con su hijito de cinco años, y de pronto el niño ve que dos pajaritos están uniendo sus piquitos como si se estuvieran dando un romántico beso. Al ver eso con sus propios ojos, el niño experimenta la sensación de ternura, y entonces tiene un motivo de estimulación afectiva, que bien puede traducirse en un tema concreto de conversación, en el cual él puede volcar toda su emoción al momento de hablar acerca de algo que nadie le ha tenido que tratar de contar.

En cambio, en la segunda escena el niño ciego va al mismo parque, pero no está en contacto con su entorno, y al no ver escenas como la antes descrita no tiene como conseguir que su afectividad se desarrolle en una forma espontánea.

En el caso de quienes han perdido la vista ya de grandes, la cosa es distinta. Yo pienso que al respecto se podría hablar de un trauma afectivo, porque definitivamente, por reiterativo que parezca, la falta o pérdida de la visión no es cualquier cosa. No es tan simple como cuando a uno se le cae un botón de la camisa.

Por eso, sin pretender adelantar conclusiones, quisiera decir que los ciegos necesitamos que se nos someta a una especie de gimnasia afectiva, de manera urgente, para estar en forma emocional. En lo que se refiere a quienes nacieron sin ver, esa gimnasia que en el fondo se refiere a la estimulación debe comenzar desde la misma cuna, y en cuanto a los que pierden la vista, la rehabilitación y el apoyo afectivo deben darse de inmediato.

Observemos las consecuencias de aquella falta de afectividad, mediante algunas tendencias de conducta que a mí me parece poder notar en nuestro colectivo. Es cierto que cada ciego es un ser individual, irrepetible, pero también es verdad que por contradicción, entre nosotros hay no pocas cosas que nos identifican.

Nuestra inercia:

En términos colectivos, los ciegos andamos como el humo, sin un rumbo definitivo. No conseguimos organizarnos institucionalmente, en una forma ordenada, efectiva y eficiente, para alcanzar si quiera un objetivo concreto, por mínimo que este fuese, para beneficio de nosotros mismos.

Nos quejamos de nuestra realidad, de las condiciones en las que nos toca vivir, pero solo cuando se nos insita a quejarnos. Por lo demás, parecería que no contásemos con la capacidad de tener iniciativa propia de acción en forma positiva, para ir más allá de nuestras quejas y tomar al toro por las astas.

Cuando reaccionamos colectivamente frente a una situación –si es que reaccionamos- lo hacemos pero no necesariamente por nosotros mismos, sino porque otros (videntes) vienen, cual salvadores a los que me parece estar escuchando: “A ver, ¡que estos amigos míos ciegos me dan pena!”

Debido a la falta de energía de tipo afectivo que padecemos, No tenemos la capacidad de movernos por impulsos propios de carácter positivo. Actuamos como consecuencia de impulsos externos, y en todo caso, nos dejamos llevar por nuestra conveniencia enfermiza y egoísta.

Nos pasamos la vida sin haber transitado del dicho al hecho, y nos quedamos en el terreno verbal. Muchas veces, entre nosotros no hay más que palabras, palabras, palabras, y palabras huecas, que nos esforzamos por adornar, pero que al final se van con el viento, antes que hayamos resuelto aquel dilema de Hamlet: Ser o no ser.

Nos enredamos en conceptos vagos y en ideas inconclusas, que entonces escondemos en frases que repetimos una y otra vez. Creemos que así vamos a quedar verbalmente muy bien, ¡y vaya que si no seremos repetitivos!

En la práctica, no tenemos la suficiente fuerza afectiva como para ser verbo, fuente de acción. Nos reducimos a ser sujetos de reacción, y en ciertos casos, daríamos la impresión de no tener otra capacidad más que la de actuar por inercia, antes que por convicción, en contra de nosotros mismos frente a las circunstancias.

Es por eso que hay quienes se han especializado en utilizar a los cieguitos, porque saben muy bien que no hace tanta falta esperar algún indicio de iniciativa coherente de parte nuestra. Han descubierto que debido a nuestra inercia pueden hasta pensar por nosotros, antes que pensar con nosotros, en temas como el de la inclusión por ejemplo.

Estamos como un barco al garete, pero resulta que en medio del mar de implicancias de la ceguera, seguimos allí como si con nosotros no fuera. Nos va y nos viene la cosa, como si tales implicancias no nos fuesen duras, adversas, y quizás perversas, o como si frente a ellas no tuviéramos que reaccionar.

Las mentes de los ciegos lúcidos, que sí los hay, nos proponen conceptos, planes, proyectos. Sin embargo, todos esos planes y proyectos se estrellan finalmente en nuestro colectivo, con algo así como una masa que ante la propuesta se queda indiferente, o que en todo caso reacciona, pero para responder de una manera negativa, y luego vuelve a su estado permanente de inercia.

Podría ser por eso que entre nosotros a veces hay quienes sienten impotencia, desilusión, y no quieren saber nada de los asuntos gremiales, llegando a decir: “Las cosas del colectivo cieguno no me interesan”.

Antes que unidos, andamos revueltos, como en un laberinto en el cual el peor enemigo del ciego no parecería ser otro más que un ciego igual que él. La prueba de ello está en el sinnúmero de instituciones que entre nosotros aparecen porque aparecen, porque aparecen y porque aparecen.

Deberíamos ir hacia arriba, pero si la moda de los videntes es ir hacia abajo, allí vamos. Sí, vamos, ¡porque no es difícil que se nos maneje como a borregos! Y tendríamos que ir al sur, pero en nuestro deseo compulsivo por estar bien con Dios y con el diablo, vamos hacia el norte, sí, sí claro al norte, ¡aunque el norte no sea el paraíso! ¿Por qué? Por nuestra inercia.

Nuestra amargura:

Hay quienes piensan, y hasta nos afirman con gran seguridad, que nosotros no vemos con los ojos, pero que en cambio sí vemos con el corazón, con el alma, y al respecto, en más de una ocasión me han dicho: “Ah, ¡qué suerte la suya de no estar contaminado con las cochinadas de este mundo! Oiga, ¡usted no se está perdiendo de nada, y por el contrario puede vivir en paz con su ceguera!”.

Sin embargo, cuando oigo algo así me sonrío, pero al mismo tiempo siento algo de pena y lástima por quien me lo dice porque, ah, si él o ella supiera cómo son las cosas entre nosotros, no sé qué impresión se llevaría. Quizás, ¡se llevaría el más grande de los desengaños! Y es que como bien dice el refrán: “Del dicho al hecho hay mucho trecho”.

La ausencia de energía afectiva deja en nosotros un profundo vacío. Este empieza a ser llenado muy pronto por una amargura que a su vez es estimulada por las condiciones negativas, generadas en nuestra realidad cotidiana por la ceguera.

Lo que quiero decir en cuanto a ello es que a cada paso que damos nos encontramos con uno y mil obstáculos, y que al no contar con una energía afectiva que sirva para amortiguar el impacto de tales obstáculos, se produce en nosotros una profunda amargura. Dicha amargura podría llegar a intoxicar el espíritu.

No es casual que los ciegos nos estemos enfrentando entre nosotros mismos. Lo hacemos, con una fuerza que debería ser utilizada para derrumbar el muro con el que la ceguera nos separa de los que ven, convirtiéndonos en algo así como prisioneros de un régimen totalitario.

¡Cuántas cortinas y muros se han caído a lo largo de la historia! Al respecto, estoy pensando en las murallas chinas, y entre otros en aquel muro de Berlín, que increíblemente hasta mediados de los años 80 del siglo pasado no se sospechaba que se pudiese caer, pero que ya no existe.

Sin embargo, el muro construido por la ceguera hasta ahora permanece en pie. ¿Por qué? En parte se debe a nosotros mismos, a nuestros enfrentamientos.

Las campañas de sensibilización, las charlitas, las conferencias ya sea a favor de la integración, o de la inclusión –lo mismo da Juana que Chana- no le han hecho ni el más mínimo rasguño al muro imperial que circunda al régimen dictatorial de la ceguera. Aquel muro sigue igual que siempre, y permanece bien custodiado por todo un ejército de mitos, prejuicios y leyendas que trabajan sin desmayo, cual esvirros fieles a la ceguera, que muchas veces nosotros alimentamos mediante nuestras conductas.

Ante cualquier intento por cruzar hacia el exterior, el mencionado ejército nos cierra las puertas. “Alto”. Los ciegos vivimos bajo un régimen plagado de contradicciones complejas, que nos obligan a vivir en este mundo, y al mismo tiempo alejados de él.

Nosotros podríamos intentar suavizar la dureza del tipo de condiciones en las que nos toca vivir. Deberíamos dejar de lado nuestras cuestiones individuales para trabajar por el bien común nuestro, pero es preciso reiterar que para eso necesitaríamos una urgente estimulación afectiva que contrarreste nuestras frustraciones y la amargura que nos asfixia.

Si fuésemos gitanos, podríamos decir que entre nosotros no haría falta leernos las manos. ¿Por qué? Es que para nadie es un secreto la de broncas, bronquitas, y broncasas que se arman en nuestro colectivo, ¡por mírame y no me toques! “Dime a qué institución perteneces, y dependiendo de eso, te diré si puedes entrar a la mía”. “¿y a quién representas tú?”. “Ah, bueno, yo a los honestos, a los decentes, a los legales, a los que realmente representan a…..”

Cuando estamos entre los videntes, los cieguitos –así nos suelen llamar- los ciegos nos portamos como niños buenos, para ver si de ese modo nos aceptan, nos integran, nos dan la carta de ciudadanía. Hacemos todo lo que está a nuestro alcance, para ver si así dejamos de ser exiliados en este mundo visual.

Cuando de otra parte los videntes cruzan el muro imperial, y en un tour curioso, emocional, visitan lo que yo llamaría el Varadero de la ceguera, es decir la parte tecnológica de nuestro mundo, nosotros nos esforzamos por dar lo mejor de cada uno. Les mostramos cómo manejamos el Jaws, cómo enviamos correos electrónicos, cómo podemos leer este o aquel periódico, y hacemos que los turistas se vayan diciendo: “Ay, ¡los cieguitos sí que son maravillosos! Sobre ellos, ¡debería filmarse un Buena Vista Tiflo Club!”

Sin embargo, cuando estamos a solas, entre nosotros se desatan las luchas intestinas. Los niños modositos, los cieguitos puros, buenos y hasta casi angelicales nos transformamos en sujetos que de pronto somos invadidos por una ira, una amargura interior de la que no logramos liberarnos. ¡Qué tal transformación la nuestra!

Nuestra escasez de realidad:

Hay algunos ciegos excepcionales que tienen la capacidad de tomar consciencia de su situación, y que pese a todas sus limitaciones, sienten un profundo deseo por informarse, por enterarse de todo lo más que puedan para así tratar de interiorizar la realidad. Se encuentran con uno y mil obstáculos, debido a la falta de vista, pero cuentan con una suficiente energía afectiva que los empuja a seguir, a seguir, y a seguir sin desmayo.

Sin embargo, en muchos de nosotros la amargura ahoga cualquier impulso sano por tratar de entrar en un contacto esencial con la realidad, más aún si ese contacto demanda esfuerzo. Nos mantiene atascados en una curiosidad ociosa, morbosa y enfermiza, que nos insita a averiguar acerca de detalles, y cosas intrascendentes, que nos sirven de entretenimiento, porque nos permiten jugar con nuestras fantasías, haciendo una y mil historias de lo más alucinantes.

Es por eso que padecemos de una escasez de realidad muy peculiar y agresiva. Esta puede llevarnos a adoptar una actitud de negación de ella, en una forma mentirosa y violenta.

Nos aferramos a mitos y leyendas que, como creo ya haber dicho, muchas veces son alimentados por nosotros mismos. Uno de esos mitos tiene que ver con nuestro gran, ¡con nuestro tremendo nivel cultural!

En efecto, en la actualidad habemos un buen número de ciegos que hemos pasado por la universidad. Nos hemos graduado, y luego de sustentar nuestras tesis, hemos recibido nuestros títulos, en medio de grandes felicitaciones, palmaditas en el hombro, besos, abrazos y frases, tales como aquella de: “Ah, realmente el esfuerzo de ustedes es digno de toda admiración”.

¿Pero es que aquellos títulos le han puesto fin a nuestra escasez de realidad?

No creamos que sí, por el hecho de tener grabados en el cerebro unos veinte poemas de Machado, de Lope de Vega, De Becker, para declamarlos en alguna reunión, y para que así la gente diga: “Ay, mira al cieguito, ¡cómo recita!”

Tampoco creamos que si por habernos aprendido de memoria lo que sucedió el día que maría Antonieta fue guillotinada, y porque tenemos la habilidad de repetir textualmente, como loros, más de una de las proclamas hechas en la asamblea nacional de la Francia revolucionaria.

Ante lo que son las cosas frente a nuestra escasez de realidad, me parece estar escuchando pretextos tales como el siguiente: “Ah, yo no veo, pero me sé todas las capitales del mundo, y por si eso fuese poco, te puedo decir qué hora es en Buenos Aires, en Toronto, en Tokio, Sin mirar el reloj”.

Imaginemos al cieguito que trata de esconder su falta de realidad, a la hora de responder un cuestionario, uno de esos cuestionarios bien simples, que a lo mejor podrían aplicarse en alguna esquina, en algún paradero, o en alguno de esos puestos de comida callejera, mientras nos vamos saboreando un rico salchipapas.

¿Qué sabes acerca de la situación de los ciegos en tu país?

“Eh, bueno, en este momento… No me acuerdo de las leyes que existen, como para sustentar el diagnóstico que pudiese darte, pero lo que sí tengo para contarte es algo de la vida de Hellen Keller”.

¿Has tenido la ocasión de leer los materiales que se refieren a Los objetivos del Milenio?

“No, porque la computadora se me colgó, en el momento que empezaba a leer la biografía del cantante de los Rolling Stones”.
¿Podrías decir cuándo se inició el movimiento tiflológico en tu país?

“No me acuerdo muy bien, pero sí te puedo decir que tengo muy presente aquel campeonato mundial de Football que se realizó en Méjico, en 1970. El campeón fue Brasil, y hasta ahora recuerdo que Pelé fue el que anotó uno de los cuatro goles con los que le ganaron a Italia en la final. En todo caso, te podría contar alguito sobre la historia de los ciegos españoles, y si quieres, te hago unas cinco citas, de memoria, de la obra de ese gran ciego llamado Homero”.

Nuestro decoratismo:

Nos encontramos ante la imperiosa necesidad de disfrazar nuestra falta de energía afectiva y aquella amargura, que tanto daño nos hace a nosotros como también a quienes nos rodean. En la práctica, los ciegos somos como actores que andamos buscando la mejor máscara posible para ponérnosla, y ver si aunque sea de ese modo se nos da algún papel; se nos integra, se nos incluye, o lo que sea, en el reparto social de la vida.

Lógicamente, entre nosotros no faltan quienes están obsesionados, enfermizamente obsesionados, con la idea de decorarse lo más que puedan, para ver si de ese modo logran dar su gatazo ante la gente. Tal es el caso de aquel sujeto que inspiró mi artículo al que irónicamente titulé: El Súper Ciego.

Podrá sonar irónico, pero los ciegos somos unos grandes decoradores. ¿Y cómo se manifiesta nuestro decoratismo? En un verbalismo que entre nosotros puede llegar a niveles increíbles.

Ante la incapacidad de recurrir a los colores, hacemos un abuso sin límites del lenguaje hablado. Sufrimos de una tremenda verborrea.

No nos preocupamos por el fondo de lo que decimos porque, por último, para nosotros no importa que lo que decimos no tenga fondo. Lo que nos preocupa es la forma en que vamos a decir lo que decimos, y de ese modo, recargamos nuestras palabras.

Tejemos frases rebuscadas, y armamos oraciones lo más enredadas que podamos, para según nosotros mismos quedar muy bien. Por si acaso, no pueden faltar los adjetivos, y cuanto más exuberantes sean estos, mejor.

Donde hay una exclamación, nos gustaría poner dos, y para expresarnos mejor aún, si fuese posible, colocaríamos tres. ¡Una no es ninguna!

Nos prodigamos en los detalles que nosotros creemos espectaculares, con el propósito de adornar nuestra oratoria lo más que podamos. Si tenemos a nuestra mano la posibilidad de citar nombres extranjeros, si sabemos proverbios en latín, frases en francés o refranes en italiano, no dudamos en llenarnos la boca con todo eso. ¿Y para qué? Para conseguir que el auditorio diga: “Ay, pero qué cieguito para más preparado”.

Al momento de empezar nuestra intervención frente a la gente, respiramos para sugerir que estamos pensando, y luego, ponemos toda una voz que según nosotros tiene un sonido señorial. Entonces mis queridos amigos, y tal como les venía diciendo…”

Me gustaría ilustrar nuestro decoratismo, valiéndome de un modelo imaginario de perorata. Desde ya, ofrezco las disculpas necesarias por los errores de sintaxis, y por cualquier salvajada que a continuación se pudiese percibir. Lo que ocurre es que estas van adrede, como un homenaje a nuestros tiflotas.

Escuchemos: “Estimados amigos y hermanos con discapacidad visual de la ceguera, que en esta noche nos hemos reunido juntos con lo cual celebramos pues el gran ¡gran nacimiento! de nuestra institución con gran felicidad. Nos hemos reunido y tal parece pues en esta noche por tanto que hubiera salido el sol por debajo de las tinieblas, que alumbra el nombre victorioso, vibrante, progresista, reivindicativo, combativo, que por tanto se refleja el carácter auténtico, diáfano, que como la luz de las estrellas alumbra todas, pero todas las buenas intenciones de nuestros henchidos corazones con discapacidad”.

Luego de ello, y dicho en buen mejicano como se lo escuché a mi amiga María Auxiliadora Durán, los ciegos nos preocupamos por decorar nuestro verbalismo lo suficiente, como para calentar el lonche, ¡pero nada más! Creemos que haciendo aquello vamos a conquistar el mundo, ¿pero cuánto lonche hemos calentado? ¿Y cuánto hemos conseguido con eso? Simplemente, nada de nada.

Sin embargo, nuestro decoratismo no termina en lo verbal. Decoramos nuestras actitudes; decoramos nuestros supuestos modales, y estos últimos los exageramos frente a los videntes, poniéndoles un acento que por la falta de vista no es natural, ni espontáneo.

Frente a los que ven, creemos que pasamos por educaditos y finos. Sin embargo, en el terreno visual, la gente nos descubre por encima de la ropa, cuando por ejemplo nos empezamos a mecer sin control, cuando miramos hacia arriba, cuando nos metemos los dedos a los ojos o a las narices, y cuando hablamos sin dominar el volumen de nuestra voz.

De otra parte, los profesionales, aquellos ciegos que tenemos el privilegio de haber sido educados, nos preocupamos por mencionar y lucir nuestros títulos cada vez que podemos. No pueden dejar de llamarnos: doctor, licenciado –ha, ¡eso no puede ser!- y nos preocupa cómo le vamos a llamar a la asociación que también habría que fundar para decorar el ambiente por todo lo alto, recurriendo al mayor número de bombos y platillos, como para producir la más grande de todas las bullas que alguna vez se haya podido oír. Lo del ideario institucional ya se verá, pero lo de la etiqueta, lo del nombre, no puede postergarse, y por el contrario debe ser singular, inconfundible, más llamativo de lo que podrían ser los nombres de otras instituciones.

En nuestra mentalidad decoratista, si no hay una denominación espectacular no hay institución, y si en la institución el nombre, el rótulo, la etiqueta son motivo de debate, no es de extrañar que algunos se aparten, aduciendo que la denominación finalmente adoptada no llena las expectativas suyas, ni las de las bases, esas bases populares que, en el fondo, como tales, no son más que un elemento también decorativo de nuestros incoherentes discursos.

Conclusión:

Frente a lo expuesto, sé que podría ser tomado por un tremendo pesimista, pero al respecto me gustaría decir lo siguiente:

Yo no considero que los ciegos seamos un caso perdido y sin vuelta que darle. Si voy al fondo de nuestra problemática, por crítica que esta sea, es porque deseo contribuir a remover nuestras conciencias. ¿Y por qué? Porque, aunque parezca lo contrario, tengo la esperanza que puedan darse formas y medios que nos permitan ayudarnos a enfrentar la situación en la que nos encontramos.

Estamos frente a un gran desafío: unirnos para luchar contra la ceguera. Sin embargo, para ello hay un requisito fundamental, y es que si no somos capaces de ser protagonistas de nuestra propia emancipación, nada hará que las cosas cambien por nosotros.

No sé si antes he planteado la siguiente pregunta:

¿Qué estamos esperando para reaccionar en forma civilizada?

Trabajemos por estimular en nosotros una energía afectiva que permita transformar nuestro interior.

#Accesibilidad #Ceguera #DerechosHumanos #Discapacidad #Discriminación #Socialismo

Día Mundial del Braille

El Día Mundial del Braille se celebra cada 4 de enero para conmemorar el nacimiento de Louis Braille, el creador de este sistema de lectoescritura para personas con discapacidad visual[1][2][3].

Origen de la Celebración

La Organización de las Naciones Unidas (ONU) reconoció oficialmente esta fecha el 17 de diciembre de 2018, mediante la resolución A/RES/73/161[4][5]. El objetivo principal es crear conciencia sobre la importancia del braille como medio de comunicación para garantizar los derechos humanos de personas ciegas y con discapacidad visual[4][5].

Características del Sistema Braille

El braille es un sistema de escritura táctil que utiliza seis puntos en relieve organizados en una matriz de tres filas por dos columnas[2][3]. Estas configuraciones permiten:

  • Representar letras, números, signos de puntuación
  • Codificar símbolos matemáticos, científicos y musicales
  • Generar 64 combinaciones diferentes de puntos
  • Permitir que personas ciegas lean aproximadamente 104-125 palabras por minuto[3]

Contexto Global

Según la Organización Mundial de la Salud, existen aproximadamente:

  • 36 millones de personas con ceguera
  • 216 millones con discapacidad visual moderada o grave[5]

La celebración busca promover la integración, accesibilidad y eliminación de la discriminación para estas personas.

Citations:
[1] https://www.once.es/noticias/la-onu-reconoce-el-4-de-enero-como-dia-internacional-del-braille-1
[2] https://sid-inico.usal.es/noticias/dia-mundial-del-braille-2022-por-que-se-celebra-el-4-de-enero/
[3] https://www.gob.mx/conadis/articulos/dia-mundial-del-braille-89348?idiom=es
[4] http://ambitointernacional.com/dia-mundial-del-braille/
[5] https://www.diainternacionalde.com/ficha/dia-mundial-braille
[6] https://ceapat.imserso.es/detalle-agenda/-/asset_publisher/02tObsnvMPnB/content/dia-mundial-del-braille_2025/20123

#Braille #Ceguera #dailyprompt #díaMundial #DiscapacidadVisual

Somosdisca :vf:Somosdisca@masto.es
2024-10-22

Hola Titánicos, cada 22 de octubre se celebra el día mundial de la uveitis, una forma de inflamación ocular, siendo la tercera causa de ceguera evitable en personas de entre 20 y y 50 años en países desarrollados.

somosdisca.es/dia-mundial-de-l

#díamundialdelauveitis #uveitis #ceguera #discapacidadvisual #perdidadevision #vision #inflamacionocular #visibilidad #cuidados #prevencion #salud #enfermedad #enfermedadautoinmune #infermedadinflamatoria #enfermedadreumatica #discapacidad #disabiility #disabilities #titan #titanicos #titanico #gentetitanica #somosdisca

Somosdisca :vf:Somosdisca@masto.es
2024-10-15

Cada 15 de octubre se celebra el Día Mundial del Bastón Blanco, con el objetivo de visibilizar el uso de este bastón blanco que constituye un símbolo a nivel mundial, para identificar a las personas con alguna discapacidad visual.

somosdisca.es/dia-mundial-del-

#DíaMundialdelBastonBlanco #baston #bastónciegos #BastonBlanco #vista #vision #ceguera #ciego #problemasdevision #enfermedadesvisuales #bajavision #visibilidad #cuidados #discapacidad #disability #disabilities #titan #discapacidadvisual #titanicos #titanico #gentetitanica #somosdisca

Mélzefynn: The Cupid GirlMel_Zefynn@mast.lat
2024-08-21

Hablemos de diversidad:
En la asignatura de "Medios audiovisuales" del profesorado de Arte, le pidieron a mi hermano que realizara un video corto de 10 escenas con 10 palabras. Es decir, una escena por cada palabra: Comodidad, cotidianidad; colores, afecto; entre otras.
Y aquí es cuando entro yo, para cubrir una de ellas. Me dijo que debía grabarme escribiendo en Braille, lo cual me pareció magnífico. Entonces, escribí en un papel la palabra de aquella escena: Diversidad.
Para el video, utilicé la herramienta de toda la vida, el mejor invento para las personas ciegas: La máquina de escribir Braille. Confieso que sentí algo de nostalgia, ya que llevaba años sin usarla. Me recordé de niña, aprendiendo a leer y escribir el sistema Braille, con el apoyo incondicional de mi familia que guiaba mis pasos. Este curioso sistema de puntos a la vista y al tacto, fue clave para que yo pudiera estudiar en una escuela común, graduándome con el mismo título como una persona más, porque es lo que soy.
Gracias, Nickito, por tenerme en cuenta en tu trabajo académico. No conozco una mejor forma de representar la diversidad. Las personas con discapacidad existimos, y también podemos estudiar; tenemos derecho a las mismas oportunidades que alguien sin discapacidad. 👩🏽‍🦯🥰♾️📸
#Ceguera #DiscapacidadVisual #Discapacidad #Diversidad

La imagen muestra la palabra "DIVERSIDAD" escrita en dos formas: en la parte superior está en braille, y justo debajo está escrita en letras mayúsculas a mano. El fondo es de color claro, probablemente blanco o gris claro.La imagen muestra a una niña sentada en una mesa, sonriendo mientras utiliza una máquina Perkins Brailler, que es una máquina de escribir en braille. La máquina es de color azul y tiene algunos adhesivos decorativos. La niña lleva una camiseta de manga larga de color rosa y tiene el cabello largo y oscuro. La mesa está cubierta con un mantel con un diseño de cuadros y flores. Al fondo, se puede ver una pared de madera y una puerta entreabierta. También hay una silla cubierta con una manta rosa con dibujos.
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2024-08-19

Hola Titánicos, cada 17 de agosto se celebra el día mundial de la Enfermedad de Coats, visibilizando esta enfermedad rara que genera una pérdida progresiva de la visión, especialmente en niños y jóvenes.

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#enfermedaddeCoats #coats #enfermedadesraras #enfermedadrara #salud #enfermedad #visibilidad #cuidados #prevencion #ceguera #bajavision #discapacidadvisual #discapacidad #disability #disabilities #titan #titanicos #titanico #gentetitanica #somosdisca

Resolviendo la incógnita 🌐RLIBlog
2024-08-16

Guantes de comunicación para sordociegos, creados en 1917 para aquellos afectados en la Primera Guerra Mundial.

Guantes con el abecedario, sí y no escritos en los dedos y el dorso de la mano.
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2024-04-24

Hola Titánicos, el último miércoles del mes de abril se celebra el día mundial del Perro Guía, visibilizando el gran apoyo que aportan a a personas con discapacidad visual, para su movilidad e independencia.

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#perroguia #perrolazarillo #perro #perrodeasistencia #ceguera #ciego #ayuda #independencia #cuidados #visibilidad #ONCE #yosipuedo #apoyo #discapacidadvisual #discapacidad #disability #disabilities #titan #titanicos #gentetitanica #somosdisca

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